Sin casi darme cuenta ya ha pasado la segunda semana en Kona y me meto de lleno en la semana pre Ironman. El tiempo ha pasado rápido pero no por que hayan sido días fáciles precisamente. Tras la primera visita al dentista las cosas fueron a peor me salió un buen flemón y la infección en la boca fue a mas. Como resultado dos días de parón, tratamiento con antibióticos y nueva visita al dentista.

Para final de semana la cosa se empezó a solucionar y las buenas sensaciones volvieron en cuanto retomé los entrenamientos y volví a coger un poco de rutina. Se repite mucho por aquí aquello de que a Kona es mejor llegar un poco verde que llegar pasado de vueltas, por falta de descanso creo que no será para mi este año por lo que quien sabe, estos días de inactividad puede que al final sean algo positivo.

El sábado participé en la travesía que se realiza sobre el mismo circuito de natación del Ironman, encontrarme bien en el agua y nadar en un buen tiempo me dio tranquilidad para saber que a pesar de haber tenido una mala semana todo volvía a su sitio y que mi estado de forma seguía ahí. Acabé el día muy contento y motivado.

Kona ya empieza a masificarse, este es un sitio tranquilo donde la gente viene en busca de tranquilidad para pasar las vacaciones pero en cuanto se despliega todo el planeta Ironman por aquí la cosa se vuelve un poco caótica. Yo me alojo en la distancia y en la altura de Kealakekua, un poco lejos para en el día a día bajar a Kona pero se agradece la paz que aquí arriba se respira y la temperatura mas fresca que hay por la noche.

Y la inmensidad de la isla siempre deja la opción de escapar a explorarla y ver todo lo que tiene para ofrecer y sentir esta naturaleza imponente. Muchas veces sin irse demasiado lejos incluso, este tubo de lava está la lado de la Queen K, había pasado cientos de veces al lado pero nunca me había parado a verlo con detenimiento.

Ahora ya si estoy en plena puesta a punto, mantengo la frecuencia de los entrenamientos pero he bajado mucho el volumen y en todas las sesiones mantengo algunos toques de intensidad, hay que dejar que el cuerpo se recupere y asimile el trabajo realizado pero sin que se “duerma”. Por el momento me siento bien, con mas chispa y fuerza en general por lo que la puesta a punto está dando sus frutos.


Poco mas que contaros desde Kona, el día de la carrera se acerca y hay ganas de competir.

¡Saludos! Aloha!