Estoy aprovechando el inicio de la temporada para repasar algunas cosas importantes. Casi todos los entrenamientos de bici los he hecho hasta ahora sobre la BH G6PRO, y antes de empezar a rodar sobre la Aerolight quería asegurar que mi posición seguía siendo la idónea, así que estuve en fitgüne con Hektor haciendo un bikefit y comprobando que todo estaba en orden.

Siempre se producen cambios en el cuerpo que pueden generar ligeros desajustes por eso considero importante repasar la posición de la bici sobre todo en los inicios de temporada o cuando se ha introducido una modificación importante.

En el bikefit pudimos comprobar que todo estaba correcto, tan solo unos ajustes en las calas, ya que debido al uso de las plantillas fütbeds que hacemos en fitgüne he mejorado la aplicación de la fuerza sobre el pedal, y así pudimos retirar una de las cuñas que tenía instalada entre la cala y mi zapatilla Spiuk RC16.

Partiendo de una postura biomecánicamente correcta pasamos al siguiente punto, la aerodinámica.

Si bien la tecnología Retül que usamos en fitgüne ya nos permite obtener la postura idónea sobre unos parámetros que también tienen en consideración la aerodinámica, lo ideal es hacer una prueba mas específica que nos permita tener datos más exactos. En el 2009 estuve en el túnel del viento de Charlotte A2 Wind Tunnel en EEUU donde el bueno de Steve Hed me introdujo de lleno en el mundo de la aerodinámica, me hizo consciente de la importancia de la misma y me transmitió durante aquellos días valiosos conocimientos que he tratado de aplicar durante estos años. Ha pasado tiempo desde entonces y tenía ganas de probar de nuevo mi posición. En esta ocasión con la ayuda de Yago Alcalde de Ciclismo y Rendimiento y el sistema Alphamantis que utiliza, nos juntamos en el velódromo de Tafalla para medir mi postura inicial y tratar de mejorarla en la medida de lo posible.

La experiencia en el velódromo es diferente a la del túnel del viento. Lo ideal sería poder hacer mediciones reales y fiables en la carretera pero por el momento esto es muy dificultoso, así que creo que rodar en un velódromo es lo que más se asemeja, con la ventaja de poder usar sistemas con la precisión que nos demostró Alphamantis en manos de Yago. El coeficiente aerodinámico se obtiene al instante, por lo que el feedback es casi inmediato y rápidamente se puede comprobar si un cambio de material o una variación en la postura es más o menos eficaz.

Mi postura de inicio ya se mostró muy buena pero tratamos de mejorarla probando diferentes cosas. Conseguimos una buena mejora aerodinámica, significativa de cara a los 180 kilómetros de un Ironman, por lo que la mañana pasada en el velódromo de Tafalla fue muy productiva. Además de diferentes posturas sobre todo variando la altura de los apoyacodos y la anchura entre los mismos, probamos todo el material «aero» de Spiuk y diferentes posiciones de los bidones en mi BH. Al final salí con la seguridad de saber qué es lo más rápido y con la opción en un futuro de probar algunas variaciones que puedan ayudarme a mejorar.

La aerodinámica es algo muy específico para cada individuo, lo que funciona para uno puede que no funcione para otro, una postura que al ojo parece mala puede resultar muy rápida, y al revés, una postura que parezca muy «aero» puede que no lo sea tanto. En mi caso me funciona una posición baja y estrecha en la parte delantera, haciendo válido el lema de nuestra grupeta triatlética de los 90 que rezaba: «junta tus codos y la aerodinámica te impulsará hacia delante» 😉 Sin embargo he visto ciclistas y Yago también me comentó que así era, en los que una posición más alta y ancha les funciona con la ventaja de comodidad que esto conlleva. La mayor anchura de hombros de la mayoría de los triatletas influye mucho en nuestro área frontal y esto es un factor a tener en cuenta.

Si tengo que daros un consejo o recomendación creo que hay una cosa que os puede ayudar a la mayoría, se trata de controlar la posición de la cabeza. Doy por hecho que todos los que queréis ir más rápido con el mismo esfuerzo usáis un casco aero, en esto no hay demasiadas dudas, diría que casi en el 100% de los casos es más rápido. El agachar la cabeza y esconderla lo máximo posible es una de las cosas que os puede hacer ganar velocidad, por regla general cuanto mas baja vaya la cabeza mejor, siempre que nos permita rodar con seguridad y veamos la carretera correctamente. Es algo que hay que entrenar y a lo que hay que acostumbrarse, pero si lo trabajáis en vuestros entrenamientos puede haceros más rápidos. Recordad, cuando queráis ir rápido cabeza baja y escondida del viento. Saludos.